Es la facilidad que presenta un acero para ser templado. Depende casi exclusivamente de la composición química y viene definida en la curva T.T.T., aunque mediante el ensayo Jominy se puede determinar la templabilidad en los aceros.
No debe confundirse con la penetración de temple: distancia a partir de la periferia en que la pieza presenta estructura completamente martensítica. Depende del tamaño de la pieza, de la severidad del temple (agente refrigerante y medio).