Tratamiento de ablandamiento que consiste en calentar el acero por encima de la temperatura critica (generalmente 740 a 880 °C) y enfriando luego hasta una temperatura de 600 a 700 °C, que se mantiene constante durante varias horas, para conseguir la completa transformación isotérmica de la austenita.
Las durezas obtenidas son bajas y pueden graduarse según la temperatura seleccionada.