Elemento químico que en los aceros laminados fortalece la ferrita y aumenta la tenacidad. También aumenta la resistencia a la tracción y el límite elástico.
Evita el crecimiento de grano en los tratamientos térmicos, por lo que mantiene la tenacidad del acero a altas temperaturas. Las superaleaciones o aleaciones base níquel son utilizadas en motores y componentes que trabajan a altas temperaturas por este motivo.
Su uso es amplio, empleándose en aceros al carbono para aumentar su templabilidad y dureza, en aceros aleados de cementación por la gran templabilidad que confiere a la capa cementada, y en aceros inoxidables, especialmente en los austeníticos donde como elemento gammágeno les confiere estructura austenítica a temperatura ambiente, con las consiguientes propiedades: ductilidad, tenacidad y resistencia a la corrosión.