Son aceros que contienen, en cantidades apreciables, carbono, manganeso y silicio; también contienen pequeños porcentajes de elementos como fósforo y azufre.
En este tipo de acero interesa una alta carga de rotura, límite elástico y alargamiento, teniendo siempre una apropiada tenacidad y resistencia a la fatiga. Estas características dependerán, principalmente, del porcentaje de carbono y manganeso que contengan.
Sus aplicaciones más comunes son piezas de poca responsabilidad como piezas de máquinas, ejes, bulones, tornillos, por ejemplo.
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