Como escribíamos en nuestro post de marzo, el acero forma parte de nuestra vida sin apenas percibirlo y hoy en día sería impensable sin la existencia del acero.
Dentro de sus múltiples ventajas, encontramos además que es un material “comprometido” con el medioambiente y que se puede reciclar. De hecho, es el material que más se recicla en nuestro planeta. Se calcula que desde el año 1.900, se ha reciclado más de 22.000 millones de toneladas de acero.
Conozcamos un poco más sobre este interesante material.
Empecemos diferenciando el Acero del Hierro. ¿Cuál es la principal diferencia entre acero y hierro?.
El hierro puro es un metal blando y maleable que se obtiene a partir del mineral de hierro existente en la superficie terrestre. Por su baja dureza y resistencia, tiene muy poca aplicación industrial por lo que se alea con carbono (entre 0,03-2% en peso) para obtener el acero, más resistente aunque menos dúctil. La aleación con otros elementos (metálicos o no) confieren diferentes propiedades a los aceros.
Existen cientos de calidades o grados diferentes de acero, elaborados para obtener unas determinadas características aptas para un fin concreto.
Estas calidades se unifican por tipos o familias en función de su aplicación o de las propiedades que presentan.
Ejemplos de Familias de Aceros Especiales
Aceros de Construcción: Además de los aceros de construcción de uso general – Aceros al Carbono no aleados, con bajo contenido de carbono – que representan una proporción importante de los aceros producidos en las plantas siderúrgicas, se fabrican aceros de construcción especiales, siendo estos, aceros al carbono aleados.
Aceros para Temple y Revenido: Aceros al carbono no aleados o aleados.
Aceros para Cementación: Aceros al carbono con bajo contenido de carbono, casi todos aleados.
Aceros de fácil Mecanización: Aceros al carbono aleados con azufre y plomo.
Aceros para Herramientas: Aceros que normalmente presentan un alto contenido de carbono y elementos que propician la formación de carburos.
Te invitamos a que consultes nuestro vocabulario donde podrás ver de manera más amplialas características de cada una de estas familias.
Pero, ¿por qué son especiales?
Para ubicarnos, tomamos como referencia la norma europea EN10020 “Definición y clasificación de los tipos de acero”.
Esta norma clasifica los aceros como “no aleados”, “aleados” e “inoxidables”, y dentro de los aceros aleados y no aleados se diferencian los “aceros de calidad” y los “aceros especiales”, detallando las garantías o requisitos que deben cumplir.
Valorando lo que dice la norma y lo que un cliente, por proceso o aplicación, requiere de un acero especial, podríamos definirlos como: “Aceros elaborados mediante un proceso de fabricación y un control del mismo que permite obtener una composición química precisa, una gran pureza (limpieza inclusionaria), y unas propiedades mejoradas para la aplicación a la que están destinados”.
¿Y por qué nos interesan los aceros especiales?
Porque necesitamos que el comportamiento en servicio de nuestros componentes sea óptimo, y para ello necesitamos aceros que presenten una propiedades homogéneas y adecuadas a las condiciones de trabajo y al ambiente en el que se desempeña. Para todo esto, tenemos que seleccionar aceros que conformen componentes con una calidad superficial, una calidad interna , y unas propiedades que puedan garantizar un correcto servicio.
¿Cuáles son los requisitos que pueden ser solicitados a este tipo de acero?
– Altas características mecánicas en determinadas condiciones de servicio.
– Óptimas propiedades para una determinado proceso de fabricación: conformabilidad en frío, maquinabilidad mejorada para procesos de mecanización por arranque de viruta, alta soldabilidad, etc…
– Durabilidad ante fenómenos de desgaste, corrosión, fatiga, sobrecargas y cargas a altas temperaturas.
– Propiedades mejoradas para su aplicación final: alta conductividad eléctrica, alta conductividad térmica, etc…
Cualquier aplicación de media o alta responsabilidad requiere uno de estos aceros, que suelen ser sometidos a tratamientos térmicos: procesos donde presentan un buen y regular comportamiento.
La tecnología avanza, y debe hacerlo en un marco sostenible. Esto implica que cada vez tengamos procesos más exigentes y aplicaciones más estrictas.
En este ámbito, el acero tiene mucho que decir: necesitamos componentes fiables que deben ser realizados a partir de acero especial.